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Edward Glaeser: El conocimiento en las ciudades como motor de desarrollo y transformación

Actualizado: hace 19 horas

Complemento de la información del artículo “Todos en el planeta deberían aprender sostenibilidad”.


El economista Edward Glaeser (2011) argumenta en Triumph of the City que el verdadero motor del desarrollo urbano no reside en la infraestructura física, sino en el capital humano. La densidad urbana genera ecosistemas de aprendizaje donde la proximidad física facilita el intercambio de información, acelerando la innovación y el crecimiento económico.


Javier Trespalacios

Según Edward Glaeser, Nueva York es el triunfo de la ciudad (foto, Javier Trespalacios)


Glaeser sostiene que las ciudades son el mayor invento de la humanidad y el espacio más eficaz para afrontar los desafíos presentes y futuros del planeta. A lo largo de la historia, las aglomeraciones urbanas han sido motores de conocimiento e innovación. En la antigua Mileto, el intercambio comercial con Egipto, Persia y el Egeo originó reflexiones filosóficas fundacionales. En Atenas, la educación cívica y el debate público protagonizado por pensadores como Sócrates, Platón y Aristóteles fortalecieron el pensamiento crítico. En Bagdad, la célebre Casa de la Sabiduría (Bayt al-Hikma) se convirtió en un centro de traducción y preservación del saber, donde eruditos griegos, persas e indios colaboraban sin barreras culturales. Siglos después, Florencia vivió el Renacimiento mediante la sinergia entre artistas como Leonardo da Vinci y Miguel Ángel, científicos, comerciantes y talleres artesanales. En la era contemporánea, Silicon Valley representa la evolución moderna de ese modelo: un ecosistema donde empresas tecnológicas, universidades como Stanford e inversores comparten un mismo espacio y una cultura de colaboración que impulsa la innovación global.


El rasgo esencial de las ciudades exitosas, según Glaeser, es su capacidad de atraer y retener talento diverso. Esta diversidad —en educación, cultura y perspectivas— es lo que permite a las ciudades reinventarse y resistir crisis. Ejemplos como Nueva York, Bangalore, Chicago y Boston demuestran que el dinamismo urbano se sostiene sobre la capacidad de innovar y adaptarse mediante la acumulación de capital humano y la apertura a nuevas ideas (Glaeser, 2011).

En todos estos casos, el factor común es la interacción humana: el encuentro entre personas, culturas e ideas. Ese es el auténtico triunfo del que habla Glaeser: las ciudades son máquinas vivas de aprendizaje colectivo.


Glaeser identifica principios fundamentales para las ciudades prósperas que resultan directamente aplicables a la transformación sostenible:


  • La proximidad como motor de innovación. Aunque la tecnología ha reducido distancias virtuales, nada sustituye el valor del contacto directo entre personas, indispensable para estimular la creatividad y la colaboración efectiva (Glaeser, 2011).

  • El conocimiento compartido como multiplicador. Tanto los espacios presenciales —conferencias, talleres, encuentros comunitarios— como las plataformas digitales permiten que ciudadanos, instituciones y empresas intercambien saberes y experiencias, generando aprendizaje colectivo acumulativo.

  • Los espacios públicos como tejido social. Plazas, parques, bibliotecas o centros comunitarios fortalecen la interacción y la cooperación, promoviendo la confianza y el capital social urbano (Jacobs, 1961).

  • La diversidad cultural como fuente de resiliencia. Las ciudades que integran distintas perspectivas, lenguas y tradiciones son más innovadoras y adaptables frente a cambios y crisis.

  • Los incentivos adecuados transforman comportamientos. Reconocimientos públicos, beneficios fiscales o sistemas de puntos sostenibles alientan la participación activa y las prácticas responsables.

  • La concentración de talento dinamiza economías. Las ciudades que atraen y forman ciudadanos capacitados generan ecosistemas de innovación, emprendimiento y conocimiento compartido (Florida, 2002; Saxenian, 1994).


En definitiva, Glaeser destaca que el auténtico motor de transformación urbana es la interacción humana, donde el conocimiento compartido, la diversidad cultural y el talento colectivo convierten a las ciudades en espacios clave para la innovación y el desarrollo sostenible.


Referencias

Florida, R. (2002). The Rise of the Creative Class: And How It’s Transforming Work, Leisure, Community and Everyday Life. Basic Books.

Glaeser, E. L. (2011). Triumph of the City: How Our Greatest Invention Makes Us Richer, Smarter, Greener, Healthier, and Happier. Penguin Press.

Jacobs, J. (1961). The Death and Life of Great American Cities. Random House.

Saxenian, A. L. (1994). Regional Advantage: Culture and Competition in Silicon Valley and Route 128. Harvard University Press.


Javier Trespalacios
Javier Trespalacios
Orbe, Suiza
2019

Edward Glaeser: El conocimiento en las ciudades como motor de desarrollo y transformación

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Tout le monde sur la planète devrait avoir des connaissances sur la durabilité

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